ekoSolFem, el grupo que trabaja la propuesta feminista de REAS Euskadi, ha elaborado un documento de medidas y propuestas para avanzar hacia un modelo de cuidados que ponga la vida en el centro desde una perspectiva público-comunitaria.
Son muchas las señales de alerta que evidencian que vivimos en un sistema biocida, imbuido en una crisis multidimensional en la que la crisis de los cuidados es una de sus facetas endémicas.
Sobre esa crisis podríamos hablar de un sistema público insuficiente, o de la privatización y mercantilización de este tipo de servicios en empresas centradas en el lucro capitalista. Podríamos centrarnos en la explotación y la precarización de las vidas de las mujeres ligadas a estos trabajos (de forma remunerada o no). O en el crecimiento de las desigualdades sociales en un escenario de respuestas reactivas. Podríamos mencionar las carencias en la atención a las personas en situación de mayor vulnerabilidad, con un modelo basado en el asistencialismo. O de los problemas de asilamiento, cansancio, soledad no deseada o salud mental cada vez más extendidos. Todos estos síntomas no son accidentales ni inconexos, sino que están directamente ligados a una organización social de los cuidados injusta.
Sin embargo, en esta ocasión, queríamos centrarnos en el aspecto propositivo, asumiendo la responsabilidad que REAS Euskadi tiene en la transformación de este modelo injusto. Por ello, ekoSolFem puso en marcha un proceso para identificar propuestas en este sentido.
Este proceso ha estado dinamizado por la cooperativa Aradia y colectiva XXK y como resultado presentamos este documento que despliega 8 medidas en dos ámbitos de actuación: lo público y lo comunitario. Una hoja de ruta para construir un modelo feminista de corresponsabilidad público-comunitaria con el que avanzar en el derecho colectivo al cuidado. Se trata, en definitiva, de una propuesta en construcción a la que os invitamos a aportar.
Queremos agradecer el cariño y cuidado puesto a este proceso por nuestras compañeras Patricia, Delicia y Silvia. Y a todas las participantes de ekoSolFem por las risas, los bucles infinitos y los aprendizajes. A todas ellas (a las que están, a las que estuvieron y a las que estarán) ESKERRIK ASKO por vuestra enorme contribución a la construcción de una economía solidaria y feminista.