
REAS Euskadi, como miembro de entidades sociales del Consejo Vasco de Cooperación, se suma a la denuncia realizada por la Coordinadora de ONGD de Euskadi y Zehar-Errefuxiatuekin sobre una enmienda a la Ley Vasca de Cooperación y Solidaridad introducida por el PNV y el PSE-EE que permitirá la colaboración del sector público con la producción, comercialización y financiación de armamento o tecnología de uso militar “que se encuadre e la Estrategia Europea de Seguridad”.
Según reveló hace unos días elDiario.es Euskadi, los partidos que forman el Gobierno Vasco —PNV y PSE-EE, con mayoría absoluta— introdujeron el pasado 28 de noviembre una serie de enmiendas al articulado de la Ley de Presupuestos para el año 2026. Entre estas enmiendas se introdujo una disposición final décima por la cual se modificaba la Ley Vasca de Cooperación y Solidaridad en su artículo 10, referido a la Coherencia de Políticas para el Desarrollo Sostenible, permitiendo, con ese cambio, colaborar económicamente con la industria armamentística, eso sí, siempre que ésta sea europea. Para REAS Euskadi la coherencia de políticas es uno de sus ejes estratégicos y consideramos que esto se trata de una cuestión de gravedad, tanto en fondo como en forma ya que nos enteramos de esta propuesta a través de los medios de comunicación.
Consideramos que esta modificación en la Ley debilita el propio instrumento y el marco de referencia de la política vasca de cooperación y solidaridad internacional, la apuesta por políticas públicas de solidaridad internacional y la propia estrategia del marco de coherencia de políticas y, más específicamente, de regulación de la actividad de las empresas vascas.
Por todo ello, nos unimos a esta denuncia pública para mostrar nuestra enorme preocupación tanto por el contenido de las modificaciones introducidas como por las formas en las que éstas se han realizado. La Ley Vasca de Cooperación y Solidaridad aprobada en febrero de 2024 fue una ley de consensos, en la que todo el sector de la cooperación participó para crear un texto asumible por todos los agentes. Sin embargo, el incumplimiento del texto es flagrante y a la vista de los acontecimientos la coherencia de políticas impulsada por esta Ley es abandonada como estrategia por el Gobierno Vasco. Como señalan en su comunicado, nosotras tampoco queremos que el dinero recaudado de la ciudadanía vasca se destine a colaborar e invertir en industrias dedicadas a la producción, comercialización y financiación de armamento o tecnología de uso militar. Queremos que se destine a sectores productivos y reproductivos que favorezcan el desarrollo sostenible y el cuidado del medio ambiente y de las personas, tanto en Euskadi como en el resto del mundo.

