La Economía Social protagoniza un noviembre lleno de actos vinculados a la designación de Donostia-San Sebastián como capital española de la Economía Social durante 2023.
La “Conferencia Europea de Economía Social: Personas, Planeta y Acción”, organizada por el Ministerio de Trabajo y Economía Social en el marco de la Presidencia Española del Consejo de la Unión Europea, ha reunido en Donostia los días 13 y 14 de noviembre de 2023 a más de 600 personas vinculadas con el sector. Durante los dos días de Conferencia Europea se abordaron diversos temas como la contribución de la economía social a la cohesión social y territorial, mediante el desarrollo social sostenible, emprendimiento social o la inserción sociolaboral de colectivos en riesgo de exclusión o las aportaciones de las transiciones verde y digital, entre otros temas, y se analizaron medidas y propuestas para seguir ahondando en la implantación de un modelo productivo que emplea en Europa a más de 13,6 millones de personas, un 6,3% de la población activa.
En este marco, representantes de instituciones europeas y de 19 países de la Unión Europea (UE) firmaron durante la Conferencia el Manifiesto de San Sebastián sobre la Economía Social. El Comisionado Especial de la Economía Social, Víctor Mesenguer, señaló tras la firma de este manifiesto “La Economía Social brinda la oportunidad de crear trabajo decente, genera cohesión territorial y social, propicia la igualdad y la redistribución de los beneficios, razones por las que debe ser tomada en mayor consideración en todas las políticas europeas”.
Los días 16 y 17 tuvo lugar, en el mismo espacio del Kursaal, FESLAN, la feria de Economía Social promovida por Lanbide y el Departamento de Empleo del Gobierno Vasco, un punto de encuentro entre las empresas de Economía Social y las personas que demandan empleo. FESLAN se organizó en dos espacios: la Feria y el Congreso.
La feria ha contado con la participación de importantes empresas de la Economía Social divididas en dos zonas según su tipología: INDUSTRYLAN, punto de encuentro del sector industrial y SERVICELAN, agentes de la Economía Social de mayor relevancia en otros sectores. Entidades como la Cooperativa Peñascal, EMAUS Fundación Social o la Red Koopera representaron a la Economía Solidaria vasca en esta feria.
El programa del Congreso incorporó, también, un espacio dedicado a la Economía Solidaria en el que tuvimos la oportunidad de presentar la ponencia “Más allá del capitalismo: la Economía Social y Solidaria” y dos proyectos que ilustran el trabajo que desarrollamos. Por un lado, el proyecto Bidegurutzean, promovido por EMAUS Fundación Social y que tiene como objetivo promover el emprendimiento solidario en Euskadi y Costa Rica y, por otro lado, presentamos la aplicación Up me Up, un buscador de empleo para la Economía Solidaria que tiene como objetivo fortalecer la Economía Social y Solidaria y a las entidades con impacto social.
Detrás de la organización de ambos encuentros se encontraba EGES, la red vasca de economía social, que está formada por seis organizaciones representativas de la Economía Social en Euskadi: ASLE -sociedades laborales- KONFEKOOP -cooperativas-, GIZATEA -empresas de inserción- ELHABE -Centros especiales de empleo- FUNKO -Fundaciones- y REAS Euskadi -Economía Alternativa y Solidaria- Esta red que agrupa a más de 2.000 empresas y genera más de 86.000 empleos en nuestra comunidad es un espacio de cooperación para promocionar y desarrollar en nuestra sociedad los valores y las prácticas de la Economía Social.
En torno a esta capitalidad se han organizado multitud de encuentros, jornadas, formaciones, proyecciones, presentaciones y eventos muy diversos, muchos de ellos liderados por organizaciones de REAS Euskadi (Economistas sin fronteras, Goiener y EMAUS Fundación Social). Entre ellos, el pasado 22 de noviembre presentamos los datos agregados del movimiento de la Economía Social y Solidaria del Estado español articulado a través de REAS Red de Redes de Economía Alternativa y Solidaria. Estos datos se resumen en el informe “La Economía Social y Solidaria en el Estado. Proceso de Auditoría Social 2023” y recogen información de cerca de 650 empresas que aglutinan a más de 300.000 personas y mueven unos 800 millones de euros. Con casi una década de trayectoria, la herramienta de la Auditoría Social se ha erigido como referente de garantía del buen hacer empresarial, clave para discriminar entre tanto green-pink-social whasing que impera en nuestras sociedades.
Por su parte, se presentaron otros dos procesos que están siendo desarrollados por la territorial de Economía Social Solidaria vasca (REAS Euskadi): el sello de garantía de la Auditoría Social y un proceso de reflexión sobre cómo definir una política laboral bajo la mirada feminista y los criterios y valores de la Economía Solidaria.
El pasado 19 de diciembre, ha tenido lugar otro hito que ha servido como cierre de los actos de la capitalidad, el Festival creativo de la Economía Social EKOS, que tenía como objetivo difundir los valores de la Economía Social a través de piezas creativas en modalidad gráfica y audiovisual y dirigido a dos públicos diferentes: estudiantes a partir de 15 años y público en general a partir de los 18. Este acto sirvió, fundamentalmente, para premiar a los mejores trabajos gráficos y audiovisuales en el que se presentaron proyectos en torno a distintas temáticas que suponen valores clave de la Economía Social: la inclusión, la sostenibilidad, la igualdad, el emprendimiento social y el desarrollo local.
La designación de Donostia-San Sebastián como capital de la Economía Social durante 2023, ha sido, sin duda, una gran oportunidad para visibilizar que existe otra manera de hacer economía, una economía más justa, igualitaria y participativa, pero, sobre todo, una economía que pone a las personas en el centro.
